Otra de las actrices que nos está llamando poderosamente la atención en este primer trimestre del 2017 es Caomei Bala, una barcelonesa de veinte años cuya experiencia en la industria se remonta a tan solo un par de meses, pero a la cual le intuimos un futuro de lo más prometedor. Caomei nos cuenta que vio su primera escena porno a principios de la secundaria y al dejarla bastante indiferente comenzó a preocuparse por su sexualidad. Con los años descubrió que lo que a ella realmente le pone es el porno gay, sin embargo reconoce que no hay nada comparable a la sensualidad y el erotismo del cuerpo de una mujer.
Tras conocer a Lukas el Bala y que este le propusiese introducirla en el mundillo, ni se lo pensó. Además se tomó como reto personal el demostrarle a todos que una chica de apariencia normal también podía exhibirse desnuda en una web disfrutando del sexo (sin embargo coincidiréis conmigo en que de normal ella tiene bastante poco…)
Sin las Chicas Bala yo no estaría en el porno. Lukas se ha dado cuenta que hay que valorar a las actrices y mi objetivo es ayudarle a conseguir que la imagen de las actrices sea algo que admirar y valorar. Me gustaría animar a toda esa gente que quiere entrar en este mundo y por pudor o miedo a lo que puedan decir los demás no se adentran. Sin miedo chicos, los que realmente os quieren apoyarán vuestros sueños sean los que sean y, si se hace bien, se puede llegar alto.
Según nos confiesa, su debut en el porno profesional fue con Nacho Vidal para Cumlouder pero inexplicablemente la escena sigue inédita mientras que otros, como Private, Virtual Taboo o Chicas Loca, ya han movido ficha. Gracias a Luis Martínez (LMD Photo) tiene algunos vídeos propios que podréis encontrar en su perfil de OnlyFans (algunos junto a las otras Chicas Bala y otros de corte fetish) y también realiza shows a través de webcam en CAM4.
¿Pero qué es lo que tiene Caomei Bala que la hace destacar del resto? ¿Será su delicioso físico? ¿Su corte de pelo al estilo ‘pixie’? ¿Los tatuajes frikis y su pelito púbico?. Lo único que sé del cierto es que cada vez que la miro no puedo pensar en otra cosa que en presentársela a mi madre. Creo que me he enamorado…
Por cierto, căoméi significa fresa en chino (que si no lo digo reviento)
