Hoy en día está ampliamente extendido que los Tubes son una de las mejores formas de consumir pornografía gracias a la cantidad y variedad de contenidos que ofrecen de forma gratuita sin embargo, de puertas adentro de la industria, no son pocas las voces que llevan tiempo alertando sobre prácticas deshonestas perpetradas por los propietarios de estas plataformas. Parece ser que las medidas para garantizar la publicación legal de los contenidos no siempre son suficientes y cuentan los damnificados que el proceso para solicitar su retirada pasa por interminables trámites burocráticos que no siempre llegan a buen puerto. Por si fuese poco, en los últimos años se ha denunciado la existencia de vídeos que reflejan presuntos actos delictivos como violaciones o abuso de menores.
Hay quién va más allá y directamente les acusa de ser responsables de la devaluación artística del porno, de haber influido en que las películas de antaño -que reflejaban un estilo de vida repleto de lujos y excesos- se hayan convertido en un producto sin alma destinado al consumo rápido y por el que, por supuesto, no vale la pena pagar.
Pero ¿son realmente los Tubes los culpables de todos los males del porno?. Sin duda es un tema complejo y lleno de matices que no vamos a poder resolver aquí pero siempre es interesante permanecer con los oídos bien abiertos para escuchar las diferentes versiones de la historia y sacar nuestras propias conclusiones.
En este aspecto, recientemente Anneke Necro, Irina Vega y Silvia Rubí, tres de las exponentes más destacadas del porno independiente de nuestro país, han estado compartiendo sus experiencias e impresiones en el podcast Hot Topic de Mantis Lab. Entre los titulares más destacados se habla sobre las condiciones abusivas de estas plataformas, concretamente Pornhub, y sobre la pérdida de control del material en el que participan, lo cual puede incluir cambios en los títulos de las escenas, recorte del metraje o vinculación de su imagen con conceptos u empresas no deseadas. También se recomienda el visionado del documental «Pornocracy» dirigido en 2017 por la periodista y ex actriz porno Ovidie y se comenta sobre diversas iniciativas que están en marcha actualmente para luchar contra el monopolio regentado por la empresa MindGeek. En este enlace se puede consultar el manifiesto redactado por varios integrantes de la industria que pretende arrojar luz sobre la realidad del funcionamiento de estas empresas así como sumarse a la campaña Trafficking Hub iniciada por Laila Mickelwait en Change.org, que lucha por responsabilizar a Pornhub de los contenidos de explotación sexual de mujeres y menores que haya podido albergar en su plataforma.