Estaba cantado que el estreno de «Star Wars: El Despertar de la Fuerza» traería consigo un renovado fervor por la saga galáctica más famosa de todos los tiempos (con todos mis respetos para «Star Trek») y, como es bien sabido, no solo de midiclorianos viven los warsiers. Un apunte: tras la publicación del primer trailer del Episodio VII las búsquedas relacionadas con Star Wars en Pornhub se duplicaron pero, en los días previos y posteriores al estreno, la tendencia se ha incrementado ¡un 1854%!. La gran beneficiada de este boom está resultando ser «Star Wars XXX» la laureada parodia pornográfica dirigida por Axel Braun en 2012 que, según informa la web GameLink, ha aumentado sus ventas en un 500% desde principios de diciembre (aunque no detallan el número de unidades).
La regla #34 de Internet dice que «si existe, hay porno sobre ello» y Star Wars no iba a ser la excepción (a pesar del empeño de George Lucas por evitarlo). De hecho son ya unas cuantas las películas para adultos que se han inspirado en esa galaxia muy, muy lejana para colarnos las más variopintas guarradas cósmicas -las más destacables, «Sex Wars» (1985) del americano Bob Vosse y la trilogía de Private «Porn Wars» (2006) dirigida por el húngaro Kovi– aunque ninguna de ellas le llegan a la suela del zapato a la mencionada co-producción de Vivid y Axel Braun Productions.
En «Star Wars XXX» no se ha escatimado en gastos y eso se nota: los decorados, las caracterizaciones y los efectos especiales no tienen nada que envidiar a los del «Episodio IV: Una Nueva Esperanza» (cuentan las malas lenguas que se trata de la producción pornográfica más cara de la historia, superando a la mítica «Pirates 2: Stagnetti’s Revenge» de Digital Playground que costó 8 millones de dólares), sin embargo sería injusto atribuirle todo el mérito a su presupuesto ya que su reparto es igualmente impresionante: Seth Gamble está genial como Luke Skywalker (más pardillo que nunca, si cabe), Rocco Reed aporta ese toque de granuja encantador necesario para el personaje de Han Solo, Allie Haze es la Princesa Leia que todos quisiéramos tener como vecina (ya me entendéis), para el papel de Darth Vader ¿qué mejor que el vozarrón y el mandoble de Lexington Steele? y Tom Byron simplemente era la mejor elección para encarnar a Obi-Wan Kenobi (algo más crápula y vicioso que el original pero igual de convincente como maestro Jedi cuando la ocasión lo requiere).
Por supuesto, nada hubiese sido lo mismo sin la dirección de Axel Braun, multi galardonado cineasta y frikazo confeso, que ha sabido cómo y qué teclas tocar para darle al aficionado exactamente lo que esperaba. Porque ¿cuántas veces hemos fantaseado con que Darth Vader le metiese todo lo gordo a la Princesa Leia en la escena del interrogatorio? ¿o que Luke Skywalker tuviese un momento realmente incestuoso con su hermana? ¿y qué tal un trío entre ellos dos y Han Solo?. Pues olvidaos de tener que seguir tirando de imaginación porque todo esto y más está en la película, además de desvelar incógnitas ancestrales como ¿C3PO es gay?, ¿tiene Chewbacca la picha esmirriada y violácea como los caniches? (spoiler: va a ser que no…)
Pero aquí no termina la cosa ni mucho menos porque «The Empire Strikes Back XXX» está confirmada y su estreno fijado para el próximo año (¿alguien duda que no tendremos «The Return Of The Jedi XXX»?). Y no son los únicos: Digital Playground también se ha subido al carro publicando hace algunos días una escena de corte Sith titulada «Force Rising», con Kleio Valentien embadurnada en sobrasada al más puro estilo Darth Maul.
Y lo que te rondaré morena. Que la Fuerza nos pille confesados…