De las muchas instantáneas que nos dejó para el recuerdo el pasado Salón Erótico de Barcelona hoy queremos rescatar la protagonizada por una joven pareja amateur que, ataviados con máscaras y el estandarte @JessyJamesx pintado en el pecho, se convirtieron en centro de atención allá por donde fueron pasando. Por supuesto no hemos tardado en contactar con ellos para intentar saber un poco más acerca de esta excitante y misteriosa pareja.
Jessy (ella) tiene veinte años y estudia la carrera de enfermería, James (él) tiene veinticuatro y trabaja en una empresa de finanzas a la par que sigue formándose en ese campo. Cuentan que desde el principio de su relación siempre estuvieron muy compenetrados a nivel sexual y, ávidos de nuevas experiencias, comenzaron a visitar clubes swinger algún que otro fin de semana. Allí se dieron cuenta de que cuando mantenían relaciones era como un espectáculo, la gente les hacía corrillo y hasta los dueños del local les ofrecían entrada gratis. Esto les animó a abrirse un canal en PornHub donde hace poco menos de un mes han comenzado a subir sus vídeos porno caseros.
De momento se toman esto como un hobby, aunque no descartan la posibilidad de debutar algún día en el circuito profesional o incluso animarse con los shows en vivo: «No es algo que tengamos en mente a día de hoy, pero quizás si se presenta el momento preciso en el lugar preciso lo hagamos, porque el morbo y el sentirnos a gusto es lo que nos conduce en este camino«. Lo que sí tienen claro es que por ahora su identidad continuará siendo una incógnita, algo que se reservan como exclusividad hacia el otro y para proteger su vida personal, lo cual a su vez consideran que aporta un cierto grado de morbo y misterio (razón no les falta).
Lo más curioso es que su promoción en el Salón Erótico de Barcelona fue algo totalmente improvisado; se encontraban allí, paseando como un par de visitantes más, e impregnados por el ambiente decidieron que ¿por qué no?. Escogieron de una parada las dos máscaras que mejor les tapasen el rostro y en el stand de Skarel Professional MakeUp fueron tan amables de pintarles los nombres en el pecho. No hizo falta más para conseguir el efecto deseado.
Ignoramos si este puede ser el principio de una gran historia o si se quedará como algo fortuito. De momento lo que os podemos recomendar es que no les perdáis el rastro porque de verdad que verlos retozar es un gozo para los sentidos.