Nuestra protagonista de hoy es un valor el alza dentro de la industria porno nacional y europea, una guapa valenciana de veintitrés primaveras que, picada por el morbo y la curiosidad, a mediados de 2015 decidió probar suerte en el mundo del entretenimiento para adultos. En un principio el plan era intentarlo junto con su pareja, con el que mantiene una relación desde hace ocho años, sólo que él se lo pensó mejor y finalmente decidió no seguir adelante. Pero Lucía Nieto, tras meditarlo sosegadamente durante seis meses, cogió su maleta llena de sueños y se plantó en Madrid donde la esperaban las cámaras de FAKings (literalmente, su primera escena comenzó nada más bajarse del autocar). Posteriormente, tras proclamarse vencedora de la primera edición del reality porno MadLifes, ha ido engrosando su currículum con escenas para productoras como CumlouderWTFPassMofosEvil AngelReality KingsBadoinkTeamSkeet, por citar algunos ejemplos, labor que alterna con los shows de webcam y el material propio que sube a su cuenta de ManyVids.

Sosegada, afable y siempre con una sonrisa en los labios Lucía Nieto se considera una persona de lo más normal, una enamorada de los deportes (de niña hizo gimnasia rítmica, de donde le viene su increíble flexibilidad), la música, el baile y la lectura, sobre todo género fantástico y cuánto tiene que ver con nutrición y los remedios naturales. Aprovechando su presencia en el reciente Salón Erótico de Barcelona, donde deleitó al personal con su simpatía y sus excitantes shows desde el escenario de ADPTube, hemos mantenido una pequeña conversación con ella para intentar conocerla en mayor profundidad.

LGU: ¿Cómo era Lucía Nieto antes de entrar en el porno?

LUCÍA: Yo he sido siempre una chica muy normal; fui al colegio y después al instituto, como se suele hacer, lo que pasa es que quería ser independiente y a los diecisiete años empecé a trabajar de repartidora de publicidad. Luego me saqué un curso de monitora de educación infantil y juvenil, estuve trabajando de voluntaria con discapacitados, también haciendo de payasa en cumpleaños y después estuve cuatro años de camarera. Luego, ya a los veinte, empecé en el porno.

¿Qué te motivó a dar ese paso?

Veía porno junto con mi pareja, con la que llevo ocho años, y era en plan que nos daba morbo. Queríamos empezar los dos pero él se lo pensó mejor y al final solo lo hice yo. Estuve seis meses pensando «¿qué hago? ¿me meto o no me meto?» y al final me lancé. Mi primera experiencia en el porno fue con FAKings.

¿Qué recuerdo guardas de aquel momento?

Me acuerdo que fue un poco todo muy de repente porque yo no sabía como funcionaba esto, no conocía a nadie. Contacté con ellos a través de otra persona que era una especie de mánager. Subí a un autobús, me fui a Madrid y nada más bajar del autobús empezaba la escena. A veces el porno no es tan ficción como la gente se piensa, hay cosas preparadas pero hay muchas otras que no. Es improvisación total (ríe).

¿Sabías algo sobre cómo es la realidad de trabajar en el porno? ¿Algo que te haya sorprendido o decepcionado?

No sabía nada. Me sorprendió que las escenas que yo veía duraban media hora, cuarenta minutos como mucho, y cuando empecé con los rodajes y vi que duraban dos, tres o incluso se han llegado a alargar hasta ocho horas, me dije «Ostras, ¿cómo puede ser?». Detrás de lo que vemos en una escena hay mucho trabajo, lo que se ve en la tele o en la pantalla del móvil es muy diferente a lo que realmente hay.

¿Qué es lo que más te gusta y lo que menos de este trabajo?

Lo que más me gusta es el buen rollo que hay entre todos los compañeros, por lo menos yo que no me llevo mal con nadie. Me encanta conocer gente, me encanta conocer mundo… soy muy abierta y en ese aspecto, bien. Lo que menos me gusta es que tienes que moverte mucho para conseguir trabajo. Tienes que tener muchos contactos, estar siempre atenta… Y también el hecho de estar viajando tanto. Me gusta viajar pero a veces también cansa.

¿Cuál es la lección más valiosa que has aprendido trabajando en el porno?

A conocerme a mí misma, a perder la vergüenza y aceptarme como soy físicamente. También he aprendido que cuando tenemos la regla se puede trabajar, que no lo sabía, y que nunca hay que ponerse las esponjitas especiales que venden porque le hace daño a los actores. Si alguna actriz lee esto que se ponga una toallita húmeda, que la lave bien para quitarle el jabón y que se la meta. Sale más rentable.

¿Te consideras feminista? Según tu experiencia, ¿crees que la mujer está explotada u oprimida en este sector?

Depende como lo mires porque la gente se confunde mucho con esta palabra. El feminismo para mí es igualdad. Realmente todos somos personas y no hay que discriminar a un sexo ni al otro. En ese sentido sí que me considero feminista, pero vamos tampoco soy muy radical (ríe). En mi caso nunca he tenido ningún problema porque con el actor, por ejemplo, siempre pacto lo que no me gusta que me hagan y lo que no le gusta a él, y si en algún momento hace algo que no me gusta le digo «oye, para», se para, se corta y ya está.

¿Qué consideras que se debería corregir o mejorar para construir una industria más sólida?

Creo que hay cosas que habrían que regular, como por ejemplo el precio que se pacta. En las escenas siempre se cobra lo mismo pero en algunas se trabajan más horas y en otras menos. No veo bien que trabajando dos horas cobres lo mismo que trabajando ocho, deberían pagarse horas extra… Pero sabiendo lo que hay, si aceptas luego tampoco puedes quejarte. Por lo demás, con todas las productoras con las que he trabajado han sido muy profesionales así que no he tenido ningún problema.

¿Qué opinas sobre los festivales eróticos? ¿Cómo ha sido tu experiencia?

Me encantan. He estado en tres, en Valencia y dos veces en Barcelona, pero el de Valencia casi que no lo cuento porque me salieron rodajes y, como en el stand donde estaba no me pagaban, podía irme libremente si me salía trabajo. Me encantan los espectáculos, creía que me gustarían menos porque no estaba muy acostumbrada pero me gusta tanto verlos como hacerlos. Pensaba que me intimidaría la gente, que me pondría más nerviosa, pero una vez que sales dices «ya, para adelante» y cuando se te pasan un poquito los nervios del primer día, mirar a la gente y ver que se lo están pasando bien, la verdad es que mola.

¿Y qué opinión te merecen los premios? ¿No crees que a veces se les otorga demasiada importancia?

Pues la verdad es que no tengo ni idea porque no tengo ninguno (ríe). En 2016 estuve nominada como actriz revelación y me gustó. Sí que me haría ilusión ganar un Premio Ninfa pero tampoco considero que sea algo necesario para tener más o menos trabajo.

¿Qué me dices de los fans? ¿Te reconocen mucho por la calle? ¿Qué tal llevas la fama?

Depende de donde vaya sí. La verdad es que lo llevo muy bien. Lo que no me gusta es que me envíen fotopollas, porque ¿qué somos? ¿pollas o personas?. Mándame primero una foto de tu cara o algo… Ver una foto solamente de una polla no me causa ninguna sensación, solo que te coja asco y diga «ah, ¡paso!» (ríe).

¿Te resulta difícil combinar tu vida profesional con la personal?

No, para nada. De hecho a mi madre se lo conté desde el primer momento y al principio obviamente no es que estuviese orgullosa, pero lo acepta. Toda mi familia me ha apoyado desde el principio, siempre me han dicho que cuando alguien me pregunte que de qué trabajo les diga que soy actriz porno. Y mientras tenga el apoyo de mi familia y mi pareja, ya lo tengo todo. Realmente mi circulo son ellos, el resto si me quieren discriminar es porque serán cerrados de mente o a saber, pero ese ya no es mi problema.

Imaginemos que no tuvieses pareja, ¿qué características debería tener la persona que quisiera conquistarte?

Primero de todo que sea divertido, que me haga reír, que me trate bien, que sea educado, que sea detallista… Y luego ya está lo físico, aunque la verdad es que en lo que más me fijo es en el carácter de la persona. Si una persona tiene las características que te he mencionado antes, perfecto.

¿Cuáles son tus aficiones? ¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?

Me encanta leer cosas de remedios naturales, propiedades de los alimentos, combinar un alimento con otro para que haga una reacción en tu cuerpo… Por ejemplo, cuando me hago un puré de zanahoria y patatas leo las propiedades que tiene o qué podría tomar para tener más calcio en el cuerpo si veo que las uñas se me ponen blancas. Y luego lo típico, el deporte, me encanta bailar… ahora he empezado a hacer unas clases de twerk y estamos haciendo coreografías, me lo paso genial. La música me encanta desde por la mañana, desde que me levanto hasta que me acuesto estoy con música. Me gusta todo dependiendo de la situación, desde el rock hasta la clásica. Luego soy más de series que de cine, me gustan cosas como ‘Black Mirror’, ‘The Walking Dead’

Pues eso es todo Lucía, muchas gracias y mucha suerte

Lucia Nieto La Gaceta Uncut

Sigue a Lucía Nieto en | Twitter | Instagram | ManyVids
Imagen de cabecera | Cumlouder