Pese a que muchos siguen considerando la incursión de la Realidad Virtual en el porno como una moda pasajera, lo cierto es cada vez son más las productoras que muestran su interés por este campo. Es el caso del gigante francés Dorcel que a mediados del mes pasado anunciaron en la MIPCOM (la feria mundial de contenidos de la industria del entretenimiento que se celebra anualmente en Cannes), que en breve sacarían su primera película 360º compatible con headsets.
Esta no sería la primera ocasión en la que Dorcel flirtea con las tres dimensiones. Ya en 2010, después de que «Avatar» y similares desatasen un auténtico furor 3D en el mercado doméstico, el estudio francés quiso avanzarse a la competencia adaptando su catálogo a este formato, lo cual se saldó con un sonoro fracaso que les originó pérdidas monumentales. Sin embargo ahora, con la existencia de smartphones cada vez más potentes y dispositivos como las Google Cardboard que posibilitan una experiencia inmersiva bastante decente a un coste reducido, esperan obtener resultados más optimistas.
Eso sí, para ellos la inversión de barata no ha tenido nada puesto que, según recogen diversos medios, entre equipamiento y personal técnico especializado (tanto en el set de rodaje como en post producción), la compañía ha invertido una suma diez veces superior a lo que acostumbran a gastar en sus películas. Todo ello sin mencionar el esfuerzo físico y psicológico que supone filmar una producción de estas características (para que os hagáis una idea, 10 minutos de metraje pueden haber supuesto un día entero de trabajo). La razón es que el estudio francés ha insistido mucho en cuidar hasta el más mínimo detalle para garantizar que el espectador disfrute de la experiencia más realista posible (y conocedores de la calidad de la que acostumbran a hacer gala, podemos estar hablando de algo realmente memorable).
Así pues, desde el pasado 21 de octubre, coincidiendo con el Back to the Future Day se encuentra disponible la película que nos permitirá meternos «En los Zapatos de un Actor X» (concretamente en los del catalán Juan Lucho), una escueta pero intensa demostración en primera persona de lo que sería tener a las impresionantes Anna Polina, Jessie Volt, Lucy Heart, Kimber Delice y Tarra White retozando a nuestro alrededor.
Quizás cuando Marty McFly llegó del pasado con su Delorean no se encontró con robo-cordones ni patines voladores, pero pajas como estas no se las imaginaba ni en sus mejores sueños.
