El Salón Erótico de Barcelona cerró sus puertas el pasado domingo 8 de octubre reventando una vez más con todas las expectativas. Según reza la nota de prensa más de 27.000 personas desfilaron por las instalaciones del Pabellón Olímpico de la Vall d’Hebron durante sus cuatros días de duración, una cifra record que consolida al evento como una de las citas más importantes del sector a nivel europeo. Gran parte de este éxito reside sin duda en una programación que este año, además de la oferta habitual de shows en vivo y muestras artísticas, ha apostado por reforzar en contenidos pedagógicos y compromiso social. Buena muestra de ello fueron las interminables colas que se formaron para acceder a las clases prácticas de PornoEducativo o a las diferentes charlas, como la impartida por la periodista Noemí Casquet sobre poliamor o la de Yaiza Redlights y Vicki Bernadet sobre el abuso de menores.
Pero empecemos por el principio. Nuestra andadura comienza el jueves a mediodía tras ser invitados a una nueva edición de la Xperiencia Mass Media, un interesante acto conducido por el locutor Alex Salgado y orientado a periodistas y bloggers del ámbito sexual, donde tuvimos ocasión de aprender de la experiencia de Carles García (abogado y co-propietario de Invertred SL) y el director y fotógrafo Julio Rocco que, junto a la actriz Yuno Love, nos desvelaron algunos entresijos de las producciones pornográficas actuales. Más tarde fuimos requeridos en el stand de Underbrain y MissPornoTV para responder a sus preguntas en una divertida entrevista que fue emitida en directo por Youtube (la cual podéis ver en el siguiente enlace).
Una vez liberados de nuestros compromisos, y con tres días aún por delante, pudimos zambullirnos de pleno en lo que a nosotros más nos gusta: el porno. Reencuentro con amigos, caras conocidas y otras por conocer como Carolina Abril, Miriam Prado, las hermanas Sheila y Kesha Ortega, Soraya Wells, Ena Sweet, Liz Rainbow, Gina Snake, Caomei Bala, Blondie Fesser, Sofia Star, Kimi Bala, Amirah Adara, Cathy Heaven, Sicilia, Shalina Devine, Gala Brown, Helena Kramer, Kiara Strong, Pamela Sánchez, Alba De Silva, Canela Skin, Venus Afrodita, Sophie Evans, Apolonia Lapiedra, Jade Presley, Kevin White, Salva Da Silva, Dinio García, Jorge Prado, Amador Xtrem, Sylvan, Emilio Ardana, Jesús Reyes, Pony y Potro de Bilbao, Alberto Blanco o Rob Diesel (por mencionar algunos) que hicieron las delicias del público desde sus respectivos stands de ADP, Miguel Escrich, Chicas Bala & LMD Photo, JP Erotic Productions, Club69, Emerald Babes, BoxTruckSex, D-Terminant, Exoticum, Porno Educativo, SpicyLab, CAM4, EnClaveGay y los diferentes espectáculos BDSM.
Mención especial también para aquellos artistas que simplemente se pasaron de visita o tuvieron una participación esporádica como Pablo Ferrari, Irina Vega, Valentina Bianco, Francys Belle, Claudia Bavel, Moisex, Bel Gris o Franceska Jaimes entre otros, además de las celebridades no vinculadas al sector como Pipi Estrada, Leticia Sabater o Aran Aznar (esta última con aspiraciones a convertirse en directora de cine X).
Sin embargo, a pesar de que nuestra visita fue de las más provechosas que recordamos, habiendo realizado multitud de fotografías, entrevistas y contactos, no podemos evitar tener la sensación de que este SEB podría haber lucido mucho más. El vigésimo quinto aniversario ha quedado reducido a un mero reclamo promocional, sin explotar apenas la vena nostálgica y acusando la ausencia de iconos de esta etapa como Nacho Vidal o Jose Maria Ponce. La moratoria por los casos de sífilis en Budapest ha mermado la cantidad de shows de sexo en vivo o ha propiciado que algunos artistas hiciesen acto de presencia de forma simplemente testimonial, como es el caso de Ramón Nomar. También se han echado en falta algunas caras habituales del evento que, en días previos a su realización, manifestaron su negativa a participar alegando diferencias con la organización. Y a todo ello hay que sumarle las habituales caídas de cartel injustificadas. Factores algunos circunstanciales, otros desafortunados y otros que quizás se podían haber gestionado de forma diferente…
Quizás pequemos de críticos, quizás nuestro deseo sea una utopía pero ¿no sería bonito que el Salón Erótico de Barcelona se convirtiese algún día en ese punto de encuentro soñado que congregase y convenciese al pleno de la familia porno española?. Sabemos que es complicado, pero contáis con todo nuestro apoyo.
¡Hasta el año que viene!